Embarazo y gatos: Conoce los riesgos y cómo prevenirlos

La llegada de un nuevo miembro a la familia es un momento emocionante, pero también implica responsabilidades. Si ya tienes un hijo gatuno en casa, es esencial entender los riesgos asociados y tomar las precauciones necesarias para garantizar la salud de la madre y el bebé.

Riesgos Asociados a la Tenencia de Gatos Durante la Gestación

Toxoplasmosis

Uno de los mayores riesgos al tener un gato durante el embarazo es la toxoplasmosis, una infección causada por el parásito Toxoplasma gondii. Este parásito puede ser transmitido a través de las heces de los gatos. Se estima que alrededor del 30-50% de los gatos pueden estar infectados, pero esto varía según la región y el estilo de vida del gato (por ejemplo, si es un gato de interior o de exterior).

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la toxoplasmosis puede causar complicaciones graves durante el embarazo, incluyendo aborto espontáneo y daños al feto.

Prevención:

• Evitar el contacto con la caja de arena de gatos: Si es posible, pídale a alguien que lo haga en su lugar. Si no, use guantes y lávese bien las manos después.
• Limpiar la caja de arena diariamente: El parásito no se vuelve infeccioso hasta 1-5 días después de que el gato excreta los ooquistes.

Alergias y Asma

La presencia de un gato puede exacerbar problemas respiratorios como el asma o las alergias, condiciones que pueden verse complicadas durante el embarazo. En estos casos es recomendable:

• Mantener la casa limpia: Aspirar y limpiar frecuentemente para reducir los alérgenos.
• Crear zonas libres de mascotas: Designar áreas en el hogar donde el gato no tenga acceso.

Consejos Prácticos para Futuras Mamás con Gatos

Visita al Veterinario: Asegúrate de que tu gato esté en buen estado de salud y que reciba tratamientos preventivos y oportunos.

Mantén la Higiene: Lava tus manos después de interactuar con tu gato y limpia su área de descanso con regularidad.

Interacción: Limita el tiempo de contacto cercano entre el gato y la madre embarazada, especialmente durante el primer trimestre.

Educación: Infórmate sobre los cuidados y necesidades de tu gato para asegurar que no se sienta descuidado durante el embarazo, y posteriormente desplazado.

En conclusión, tener un gato durante el embarazo puede ser seguro siempre que se tomen las precauciones adecuadas. Al seguir estas recomendaciones, puedes disfrutar de la compañía de tu felino mientras te preparas para la llegada de tu pequeño.

Si tienes alguna duda o preocupación, no dudes en consultar a tu matrona y veterinario para obtener orientación adicional. La salud y el bienestar de todos los miembros de la familia son lo más importante.